El creciente comercio integrado en los mercados de América Latina ha requerido que los generadores de carga y los encargados de su transporte tengan una comprensión clara al contratar un seguro de carga. Esto garantiza que todos los involucrados conozcan sus derechos y responsabilidades en caso de un incidente. Para apoyar y facilitar este entendimiento, se presentó a finales del año pasado un documento internacional complicado: “Responsabilidad Civil del Transporte Terrestre en Diversos Países“. Este documento proporciona información sobre los regímenes legales que determinan la responsabilidad del transportista de carga terrestre , lo cual es fundamental debido a la interconexión de los mercados latinoamericanos.
Al mismo tiempo, el compendio ayuda a que el asegurador comprenda la cantidad que puede recuperar en caso de un pago por un incidente, y en el caso del propietario de la carga, la cantidad que puede reclamar. “Estamos en un punto de partida para crear conciencia sobre el negocio que tiene el transportista terrestre en cada país y para que realmente comprenda su remuneración y hasta dónde llega su responsabilidad. Es una especie de guía para unificar y construir un bloque que tenga una equivalencia legal más sólida con el servicio y la remuneración que recibe el transportista”, afirmó Adriana Grillo Correa, CEO de Grillo Correa Consultorías y autora de la publicación.
En cambio, Leonardo Umaña, director ejecutivo de la Asociación Latinoamericana de Suscriptores Marítimos (ALSUM), explicó que es importante tener en cuenta que los regímenes legales fueron creados en una época en la que el proteccionismo era el enfoque económico dominante, así como la escuela “cepalina”, el estructuralismo y la situación de importaciones. En este sentido, es crucial tener claridad sobre las normas que no solo mejoren la planificación en las operaciones de transporte, sino también realizar una “ingeniería jurídica” en las operaciones de logística, como menciona Grillo, para anticipar y prever posibles conflictos y facilitar su resolución.
Es importante resaltar que, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), se espera que este año el comercio global de productos recupere parte de su dinamismo, lo cual podría impulsar las exportaciones en la región. Sin embargo, aún queda pendiente el gran desafío de avanzar en la diversificación y generación de conocimiento en las exportaciones regionales de bienes y servicios, con el objetivo de lograr una participación más activa y sostenible en el comercio mundial. Esto se menciona en el informe Perspectivas del Comercio Internacional de América Latina y el Caribe 2023 de la Cepal.